25 marzo 2013

Radiografía de una autonomía quebrada

La imagen de la prosperidad de la Comunidad Valenciana se rompe en pedazos.

Fuente: Ministerio de Hacienda, Banco de España y Consejería de Hacienda de la Generalitat Valenciana.

La Comunidad Valenciana está a un paso de convertirse en la Grecia española. La autonomía que el PP presentó como un modelo de gestión en los años de Gobierno socialista está hoy al borde del default.Los datos económicos referidos a las cuentas de 2012 han evidenciado que la Generalitat, que preside Alberto Fabra, será incapaz este año de cubrir el coste de servicios esenciales, como sanidad y educación, sin la aportación de fondos de rescate adicionales por parte del Gobierno que preside Mariano Rajoy.
El caso de la Comunidad Valenciana no es único, hay otras autonomías en situaciones similares, pero nunca antes había sido expuesto con tanta crudeza por parte del Gobierno valenciano. Su consejero de Hacienda, Juan Carlos Moragues, no oculta su impotencia para sostener servicios básicos —solo el sostenimiento de la sanidad y la educación rondará los 9.000 millones de euros— con una financiación autonómica que este año rondará los 8.300 millones. “Hay que establecer una ruptura con el modelo de financiación existente basado en el statu quo y diseñar un nuevo modelo más simple y basado en criterios poblacionales”, señala Moragues.
Y es que los indicadores sobre la ejecución presupuestaria de 2012, han supuesto un mazazo para el presidente valenciano. Desde que sustituyó a Francisco Camps al frente de la Generalitat, en julio de 2011, Alberto Fabra ha vivido obsesionado por reducir la ingente deuda acumulada por su antecesor y por evitar que los cortes de luz en la Administración autonómica, la falta de calefacción en los colegios y las protestas por los impagos a discapacitados, farmacéuticos y colectivos de todo tipo se convirtiesen en la imagen diaria de la Comunidad Valenciana en los noticieros.
Sin embargo, pese a que el año pasado Fabra logró recortar distintas partidas de gasto, por un importe cercano a 2.000 millones de euros, el esfuerzo parece haber sido baldío. El ejercicio de 2012 se cerró con un déficit rayano en el 3,5%, más del doble del objetivo del 1,5% del PIB fijado por el Ministerio de Hacienda y el mayor de todas las autonomías españolas. El desfase entre ingresos y gastos no financieros superó el 40% y las perspectivas para este año no son mejores.

LA BURBUJA INMOBILIARIA CREÓ UN ESPEJSIMO Y ANIMÓ EL DESPILFARRO

Todo ello ha hecho que Standard & Poor's (S&P) rebajase la calificación de la Comunidad Valenciana a largo plazo hasta BB negativo. Se trata del segundo nivel de grado especulativo o bono basura, que está tan solo un escalón por encima de la calificación griega. "Las cifras de Valencia están por debajo de nuestro escenario más pesimista, lo que señala posibles dificultades para lograr una consolidación fiscal", afirma en su informe la agencia.
Algunos de los indicadores son para ponerse a temblar. Pese a los ajustes acometidos, entre 2008 y 2012, la Generalitat duplicó con creces la deuda acumulada desde la década de los ochenta. De 13.052 millones, que representaban el 12,1% del PIB hace cuatro años, se pasó a una deuda de 29.437 millones en 2012, según los últimos datos del Banco de España. Una cifra que representa el 29,3% del PIB regional y la mayor de todas las autonomías en términos relativos.
A pesar de ello, el 1 de enero de este año, la Generalitat tenía 4.600 millones de euros pendientes de pagar a sus proveedores y, a fecha de hoy, tan solo confía en poder transformar esta deuda comercial en deuda financiera a través de las líneas de crédito del Gobierno. El problema es de tal magnitud que, tras las consejerías de Sanidad y Educación, el departamento con mayor dotación presupuestaria en 2013 es el de servicio de la deuda, con 1.300 millones de euros destinados a pagar intereses. Una cantidad que permitiría construir solo en un año casi diez aeropuertos como el de Castellón.

LA PARTIDA MÁS GRANDE, TRAS SANIDAD Y EDUCACIÓN, VA A PAGAR LOS INTERESES
Las razones que han llevado al borde del precipicio la autonomía que preside Fabra hay que buscarlas, sin embargo, en otros puertos. La Comunidad Valenciana reúne tres indicadores que han sido letales en esta larga crisis económica: una renta per càpita un 12% inferior a la española, una balanza fiscal negativa y una financiación autonómica que siempre ha sido inferior a la media del conjunto de las autonomías de régimen común (211 euros menos por habitante en 2010, último año de referencia).
Durante los años de crecimiento económico, gestionados mayoritariamente por Camps, la mayor participación en los ingresos del Estado y, sobre todo, la recaudación generada por la burbuja inmobiliaria permitieron al PP valenciano compensar la deficiente financiación autonómica y desplegar una política de escaparate. Tan solo en 2006 —el año de la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia, las regatas previas de la Copa del América y las conversaciones con Bernie Ecclestone para conseguir el premio de Europa de fórmula 1— se recaudaron 2.421 millones de euros gracias a la economía del ladrillo.
Esos ingresos extraordinarios, que inyectaron ríos de dinero, sobre todo a orillas del Mediterráneo, permitieron impulsar grandes eventos; hitos arquitectónicos y espectaculares infraestructuras. Todo ello posibilitó que Francisco Camps —“un fenómeno”, como lo calificó Mariano Rajoy en 2007— levantase un espejismo de prosperidad por el que se colaron el despilfarro y la corrupción. El año pasado, los ingresos procedentes del sector inmobiliario no alcanzaron ni la cuarta parte de lo recaudado en la época dorada (630 millones) y hoy la mayor parte de las grandes infraestructuras tienen puesto el cartel de “se vende o se alquila” mientras los servicios básicos sufren una situación de deterioro paulatino.
Según un estudio encargado por la potente Asociación Valenciana de Empresarios, el gasto en grandes eventos explica el 12% de la deuda acumulada por la Generalitat, al que hay que añadir otro 8% procedente del sector público valenciano. El 80% restante tendría su origen en la deficiente financiación acumulada, según este estudio. "La única solución es que el Gobierno modifique el sistema para equiparar la financiación valenciana a la media estatal y que, mientras tanto, arbitre una solución de emergencia", admite el Gobierno valenciano.

11 marzo 2013

Juan Francisco Martín Seco: "Yo creo que esto va a explotar"


Autor del libro 'Contra el euro. Historia de una ratonera', este economista e interventor del Estado, se pregunta en voz alta algo que muchos piensan en voz baja: ¿merece la pena seguir por la vía de la austeridad o debemos intentar que se rompa la moneda única?

Juan Francisco Martín Seco, en una imagen de archivo.
JUAN FRANCISCO MARTÍN SECO

Juan Francisco Martín Seco, interventor del Estado, profesor, articulista en varios medios y autor de media docena de libros sobre economía, no duda en calificar de "chapuza" la unión monetaria que ha traído el euro. Ve en el diseño institucional de la Unión Europea (UE) y en esa unión monetaria tan mal pergeñada hace 20 años los orígenes de la actual crisis económica. Ahora publica Contra el euro. Historia de una ratonera (Editorial Península), su última obra, en la que no se muerde la lengua y se pregunta si no ha llegado el momento de hacer "una voladura controlada" de la moneda única.
De la lectura de su libro uno se lleva la impresión de que esta crisis era evitable, sobre todo porque se veía venir desde hace mucho tiempo. Pero lo que más indigna es que nadie hizo nada.
Hace ya tiempo que era evidente que el diseño de la unión monetaria conducía inevitablemente a las consecuencias que estamos sufriendo. Desde el punto de vista teórico hubo muchos autores, no en España ni en Europa, sino autores americanos que pusieron el dedo en la llaga: decían que los países de la UE no constituían lo que llamaban una zona óptima monetaria. Antes de la llegada del euro ya pudimos ver cómo el Sistema Monetario Europeo (SME) fracasaba estrepitosamente y cómo era incapaz de mantener los tipos de cambio fijos. Si no se era capaz de mantener el tipo de cambio fijo con países tan heterogéneos pues malamente después se podía mantener la unión monetaria.
¿Hay alguna salida a la crisis?
Soy muy pesimista. Creo que no se debería haber hecho la unión monetaria porque es una ratonera de la que es muy difícil salir. Aquí hay dos opciones: tirar hacia adelante o volver hacia atrás. Tirar hacia delante implicaría la creación de una Hacienda Pública y hacer una gran transferencia de recursos de los países ricos a los pobres o menos ricos. De esta forma se implantaría una fuerte política redistributiva a nivel regional, como lo que ocurre en España con el Gobierno central y las Comunidades Autónomas. Esa es la verdadera unión fiscal y no de la que habla Merkel. Pero Alemania nunca va a aceptar eso, por lo que es casi imposible ese escenario.
"En este viaje nos hemos dejado gran parte del Estado social por el camino"
¿Y la vuelta atrás?
La salida hacia atrás sería volver a las antiguas monedas, romper la unión monetaria. Que eso tiene costes graves nadie lo duda, pero es posible que los costes de seguir en el euro sean incluso mayores. La UE, sin embargo, no ha establecido un camino de vuelta atrás. En esa tesitura, los escenarios son múltiples: no es lo mismo que salga un solo país o que se rompa el euro y salgan todos, lo que sería mucho menos costoso. Si saliera un solo país el coste sería mucho mayor; pero tampoco es lo mismo que salga Alemania, donde a lo mejor el resto de los países se quedarían en una situación mucho mejor, o que salga Grecia. Todos esos escenarios tienen altos costes, pero conviene plantearse dos cosas: primera, si los costes de permanencia en el euro no van a ser incluso mayores y dos, si a pesar de todo el euro no terminará rompiéndose. Y si se diera esta segunda situación nos encontraríamos en la peor situación posible: después de pasar no sé cuantos años en el euro con unos costes enormes, tendríamos que asumir el sobreañadido de dejar la moneda única.
Ve factible entonces la salida del euro.
Lo dije cuando se constituyó la unión monetaria y lo repito ahora: no puedo creer que Grecia y Alemania tengan el mismo tipo de cambio para siempre. Eso es imposible. En los 30 años anteriores a la unión monetaria el marco alemán se había revaluado un 500% con respecto a la peseta y el dracma se había devaluado en el entorno al 2400% respecto al marco. Pensar que esa evolución tan dispar en los tipos de cambio se iba a acabar por el simple voluntarismo de unos dirigentes políticos era absurdo. La prueba es que los mercados no se lo creen: si estuviesen seguros de que no va a haber devaluación y que el euro va a permanecer, no habría ninguna razón para mantener tipos de interés distintos para pagar la deuda pública. Los que dicen que el euro no se puede romper, que va a permanecer, argumentan que el coste sería altísimo, lo explican diciendo que si se rompiera el euro, las monedas de los países del sur se devaluarían muchísimo y las monedas del norte se revaluarían muchísimo. Pero al decir eso están aceptando que los tipos de cambio que tenemos ahora no son reales. Es lo mismo que cuando me preguntan si el euro está débil o está fuerte, si debería revaluarse o devaluarse. Yo siempre contesto '¿qué euro?' Porque probablemente la moneda de Alemania debería revaluarse con respecto al dólar, pero la moneda de España debería devaluarse. Pero al tener la misma moneda no se puede devaluar y revaluar a a la vez. Ese es el gran problema.
¿Es sostenible a largo plazo esta situación?
No lo es. El primer problema lo vamos a tener con Grecia, que tendrá que hacer otra quita de deuda. Los que pregonan el gran coste que supondría la ruptura del euro argumentan que sin el euro se producirían quitas de la deuda, pero es que eso ya ha ocurrido con Grecia dentro de la unión monetaria. A Grecia, o le quitan deuda o no va a poder pagar.
España no parece estar muy lejos de Grecia.
Sí, es cierto. Si en la unión monetaria sólo estuvieran Alemania y Francia, lo que le ocurre a Grecia le terminaría pasando a Francia porque la economía francesa es distinta a la alemana, aunque en mucha menor medida que la nuestra. Cuando se hace con países homogéneos las contradicciones son menores, pero si yo fuese francés no querría quedarme en la unión monetaria sólo con Alemania.
¿Está España abocada a una quita o un rescate?
Yo no sé por dónde va a explotar esto, si va a explotar por Grecia y luego habrá una reacción en cadena, pero yo creo que va a explotar. Si se recuperase la confianza en España y a pesar de todo volviese a haber inversión y siguiésemos creciendo a crédito, el panorama tampoco sería nada halagüeño porque ya hemos perdido la democracia. En este viaje nos hemos dejado gran parte del Estado social por el camino. El mismo diseño de la UE es totalmente deficiente: tenemos un Banco Central Europeo que es el que realmente manda, que impone condiciones a los Gobiernos, condiciones neoliberales, donde te dicen que tienes que bajar la pensiones, recortar la sanidad y dar dinero a los bancos. Es tremendo. Quedarnos en la unión monetaria significa retroceder 80 años en la historia de este país.


¿Estamos a tiempo de evitarlo?
portada del libro 'Contra el euro'Esa es la cuestión: ¿merece la pena seguir por la vía de la austeridad o debemos intentar que se rompa el euro? Porque quizá sea mejor, con todo el coste que debemos asumir, intentar que se rompa el euro. Eso no significa que España se tenga que salir mañana mismo del euro; significa que todo el mundo acepte que la unión monetaria ha sido un gran fracaso y que no se debería haber hecho. Implica un cambio de mentalidad, el de decir 'vamos a minimizar costes y vamos a ver cómo se puede hacer un desmontaje de la unión monetaria igual que se hizo el montaje' y en eso deben confluir España, Portugal, Grecia, Italia e incluso Francia. Según se vayan viendo y agudizando las contradicciones será más fácil que se unan. Pero el problema es que frente a Alemania los países del sur no se han unido. Cada uno ha intentado salvarse por su cuenta. Quizá lo mejor sería una voladura controlada del euro. A lo mejor ha llegado ese momento, que no será ahora ni mañana porque hay muchos intereses y reticencias, pero deberíamos exigir a nuestros gobernantes una postura de firmeza en Bruselas y desde luego corregir las cosas que se pueden corregir: el funcionamiento del BCE, la presión frente a Alemania para no seguir por la vía de la austeridad, no inyectar dinero público en los bancos y dejar quebrar a alguno. Pero para eso hay que cambiar la mentalidad y empezar a pensar y aceptar que la constitución de la unión monetaria ha sido una chapuza impresionante.
¿Se puede contar para eso con los actuales gobernantes?
Parece que no, aunque es cierto que a medida que las contradicciones sean más claras, la presión será más fuerte. Es evidente que aquellos que han gobernado España en los último 25 años difícilmente aceptaran que se han equivocado radicalmente. Pero cada vez hay más gente que acepta ese error: cuando yo decía estas cosas en 1992, 1994, 1996, se me llamaba de todos y ahora la gente empieza a ver que eso no es ninguna tontería. Incluso el discurso del PSOE, tal vez porque está en la oposición, está cambiando y ya dice que hay que plantar cara a Europa. Ese es el camino. Aunque es un camino triste, complejo y poco esperanzador.
Quizá la clave sea la presión ciudadana.
Lo veo muy complicado. Yo no soy nada optimista al respecto. En Europa nos hemos acostumbrado a una vida demasiado cómoda. Hay gente que habla de un iniciar un proceso constituyente, pero habría que ver cómo se hace.
"Lo de Merkel es puro colonialismo: imponer el objetivo de déficit y poner un supervisor para que lo controle no es unión fiscal"
Antes dijo que la unión monetaria es una gran chapuza. ¿A quién ha beneficiado esa chapuza?
Alemania es la gran beneficiada de la unión monetaria porque primero mantiene al resto de países atados por el tipo de cambio, lo que hace que ella pueda exportar todo lo que quiera y nosotros no podamos ser competitivos al no poder devaluar. Pero además ella se puede financiar a unos tipos de cambio bajísimos gracias a que nosotros nos financiamos a unos intereses más altos. Alemania está siendo la gran beneficiada de la crisis: no hay más que ver que antes de la crisis la renta per cápita de Alemania perdía porcentualmente puestos dentro de la UE y en estos momentos los gana. Además, hay una distribución totalmente injusta porque una devaluación tiene la ventaja de que disminuye por igual los precios interiores de tal manera que vuelve a ajustar las cosas, pero ajusta respecto al exterior: dentro del país la relación de precios incluyendo los salarios, los tipos de interés, etcétera, no cambia. Una devaluación divide el coste por igual pero ahora como no se puede devaluar, el ajuste se hace con más paro, bajo crecimiento y reducción de salarios.
La responsabilidad de Alemania en la crisis parece evidentísima
Lo de Merkel es puro colonialismo: imponer el objetivo déficit y poner un supervisor para que lo controle no es unión fiscal. La unión fiscal implica impuestos comunes y prestaciones comunes. Debe servir para reequilibrar los Estados. Lo malo es que la unión monetaria sólo se puede mantener si al mismo tiempo hay una Hacienda pública capaz de compensar los desequilibrios que se crean dentro de esa unión monetaria. Alemania nos ha estado prestando durante años para que compráramos sus productos, pero cuando los bancos alemanes y franceses pensaron que no íbamos a poder pagar dejaron de prestar. Y entonces llegaron los problemas. Este mismo proceso se dio con el Sistema Monetario Europeo, antes del euro, cuando teníamos el tipo también fijo pero se podía mover un 2,25%. Entonces nos estaban prestando y teníamos un déficit en la balanza por cuenta corriente del 4%, pero entonces se podía devaluar la peseta y se solucionó el tema. Pero con el euro ya no había devaluación posible, y los bancos, tan inteligentes ellos, pensaron que no había peligro porque no podía haber devaluación. La devaluación es una quita encubierta. Si devalúas la moneda vas a pagar menos porque lo pagas en una moneda que vale menos. Cuando ven el peligro de la devaluación los mercados reaccionan mucho antes y dicen 'no prestamos más'. Y obligan a devaluar. Con el euro, los bancos alemanes y los franceses se confiaron hasta que el problema llegó al 10% del PIB en la balanza por cuenta corriente española.

Los médicos rechazan aplicar el plan de Sanidad para reducir consultas e ingresos de pacientes


  • Los facultativos de los centros de salud coinciden en que "por 500 € al año de productividad" no pondrán en riesgo a sus enfermos.

Trabajadores de Urgencias alegan que atender en menos tiempo es imposible "a no ser que se baje la calidad del servicio"

Manifestación por la defensa de la Sanidad Pública

«Yo por 500 euros no me la juego». Esta era la frase más repetida ayer entre los médicos consultados por este periódico sobre los indicadores que la Conselleria de Sanidad va a emplear para pagar la productividad variable a los 60.000 profesionales que trabajan en hospitales y centros de salud de la Comunidad Valenciana.
Unos indicadores que pasan por incentivar a los médicos que ahorren en medicamentos, pruebas diagnósticas, a quienes menos ingresos hospitalarios hagan desde Urgencias o a los que eviten que los pacientes acudan en exceso a la consulta de su médico de familia.
«Estos indicadores perjudican a mis mejores médicos, sobre todo a los pediatras, que tienen las agendas más llenas», señalaba el coordinador de un centro de salud de la ciudad de Alicante. Este facultativo tenía su postura muy clara. «Yo pienso seguir recetando igual que siempre y remitiendo al especialista cuando a mí me parezca, me importa muy poco no cobrar la productividad». Y es que, según cálculos del Sindicato Médico, los 18,5 millones de euros que la Conselleria de Sanidad ha destinado a este capítulo –3,5 menos que el año anterior– supondrán unos 500 euros al final del año para los trabajadores «más cumplidores». Por ese dinero, «nadie se va a arriesgar a que le ocurra algo a uno de sus pacientes», señala Pedro Plou, presidente de este sindicato en la Comunidad.
Entre los médicos de Urgencias, a los que van dirigidas algunas de las medidas de ahorro, la opinión es similar. Un facultativo de este servicio señalaba ayer que «siempre hay ciertas presiones para que ingreses lo menos posible a los pacientes, pero a veces es imposible y más en aquellas patologías que en especializada tienen una gran lista de espera». Nadie se la juega, añadía, «a dar de alta a un enfermo y que no lo pueda ver el médico correspondiente hasta dentro de un mes». Respecto a la reducción de los tiempos de atención a los enfermos de Urgencias, otro de los objetivos de Sanidad, este médico sostiene que «es imposible, a no ser que rebajemos la calidad del servicio». Para este facultativo, el dinero que paga Sanidad en concepto de productividad es irrisorio «sólo con la carrera profesional yo he perdido 360 euros mensuales». Además, «debería ser un incentivo al profesional que se esfuerza, que se recicla y no al que más ahorra».
Para otro médico de un centro de salud de Alicante los indicadores propuestos por Sanidad, en general, «no van a tener calado entre los sanitarios, porque la mayoría somos consecuentes con nuestro deber de curar al paciente». El temor, añade otro facultativo, «es que en todas partes hay colaboracionistas y lo peor es que, con planteamientos de este tipo, parece que los médicos somos los culpables de la situación económica en la que está la Generalitat Valenciana».
Por otro lado, el conseller de Sanidad, Manuel Llombart, anunció ayer que su departamento va a emprender acciones legales contra UGT por el estudio presentado hace unos días en el que se asegura que más de 2.700 pacientes fallecen cada año en la Comunidad por la mala gestión de la sanidad. Para Llombart, este informe «es una ofensa absoluta al Servicio Valenciano de Salud y a sus 60.000 profesionales que trabajan día a día por los pacientes». Según el conseller, los datos de este informe son falsos y su metodología «bastante cuestionable».
Reducción de mecánicos en el Hospital General
La Junta de Personal del Hospital General de Alicante ha denunciado la intención de la Gerencia del centro sanitario de suprimir uno de los puestos de mecánico por las noches. Habitualmente hay tres trabajadores de este servicio en horario nocturno, pero uno de ellos lleva tiempo de baja y su puesto no se ha cubierto por el momento y, según denuncia la Junta de Personal, tampoco hay intención de sustituirlo en un futuro. Desde el sindicato UGT en el centro sanitario alertan de la «temeridad» de dejar sin cubrir este puesto, ya que los mecánicos son los encargados de arreglar cualquier avería que surja en el hospital a cualquier hora del día «incluidos los fallos en los aparatos de oxígeno».


07 marzo 2013

UGT denuncia que el 'modelo Alzira' valenciano causa 2.750 muertes al año

El sindicato asegura que el modelo de sanidad pública privatizada presenta "deficiencias" que repercuten "negativamente sobre la salud y la vida de las personas". Cándido Méndez pide a las administraciones que, antes de cambiar el modelo de gestión sanitaria, "expliquen y demuestren" con datos sus decisiones





En la Comunidad Valenciana, donde se implantó por primera vez en España el modelo público de gestión privada en la sanidad (el famoso modelo Alzira), mueren cada año 2.752 personas prematuramente. Así lo ha denunciado UGT en su informe Cuestión de vida o muerte, que relaciona dichas muertes conrazones que son "exclusivamente imputables" a las "deficiencias" en la gestión del servicio público de salud de la Comunidad Valenciana. Hace unas semanas, cuando dicho informe se dio a conocer en la autonomía citada, la consejería de Sanidad ya amenazó con emprender "medidas legales" contra la organización sindical,según informó el diario El Levante.
Hoy, el secretario general de UGT,Cándido Méndez, se ha vuelto a mostrar convencido de que privatizar la sanidad puede tener consecuencias "negativas" para la salud de los ciudadanos y ha pedido a las administraciones que, antes de cambiar el modelo de gestión sanitaria, "expliquen y demuestren" con datos sus decisiones. Méndez se ha pronunciado así durante la presentación del informe sobre el sistema sanitario 'Cuestión de vida o muerte', realizado por UGT, y que analiza el sistema sanitario valenciano -modelo Alzira-, el "primero" que inició el "proceso de privatización", y el impacto que éste está teniendo en la salud de los ciudadanos. Un modelo que, según ha alertado, es el que pretende "implantar" el Gobierno de Mariano Rajoy en toda España.
"En una situación como la actual, donde la crisis económica se está aprovechando para privatizar servicios públicos fundamentales, como es el servicio público sanitario, antes de tomar esas decisiones, de manera poco transparente, los políticos tendrían que explicar qué efectos tiene la privatización en la salud de las personas. Y más aún, cuando existe ya la experiencia en la Comunidad Valenciana y se ha demostrado que este modelo afecta al 20% de la población".
De hecho, el estudio realizado por el sindicato y basado en datos "públicos y publicados oficialmente" entre el año 2007 y 2008, muestra, según ha informado el secretario general de FSP-UGT, Luis Lozano, que las deficiencias en la gestión del servicio público de salud de la Generalitat valenciana causan cada año unas 2.752 muertes prematuras sobre la media nacional. Unos fallecimientos que, a su juicio, no se habrían producido "si el cuidado de la salud hubiese sido encomendado a los servicios públicos de salud", en lugar de a la "Agencia Valenciana de Salud de la Generalitat".
Además, si se compara con la sanidad pública de las comunidades autónomas "más avanzadas" y "más comprometidas" en el cuidado de la salud de los ciudadanos, las cifras de estas muertes prematuras se incrementarían hasta en un "50%". "Las conclusiones muestran palmariamente que el derecho constitucional a la igualdad de oportunidades en el acceso a la salud mediante un sistema sanitario público gratuito, universal y de calidad, es una entelequia para los valencianos.
"En esta comunidad se está incumpliendo escandalosamente el precepto constitucional y queda demostrado que la salvaguardia de la salud y la igualdad de oportunidades en la asistencia a los ciudadanos no depende del mandato constitucional, sino de las respectivas políticas autónomas y, la mayor o menor, sensibilidad de los gobiernos regionales de turno hacia la salud pública", han destacado.

¿Eficacia y eficiencia?

A lo largo del documento, UGT ha analizado la eficacia del sistema sanitario valenciano, centrándose en las enfermedades del sistema circulatorio, las respiratorias y las patologías crónicas de hígado. Además, ha estudiado cuál está siendo la eficiencia de la gestión, llegando a la conclusión de que aunque la salud de los valencianos es "mejor" que la media del resto de los españoles, se producen más fallecimientos prematuros.
Además, la esperanza de vida al nacer es de tres meses menos que la media española; la esperanza de vida de buena salud es de un año menos; y la esperanza de vida libre de discapacidad de un año y medio menos. "Esto está ocurriendo porque, además, la comunidad está a la cola en financiación per cápita en gasto sanitario", ha destacado Lozano.
Dicho esto, el dirigente sindical ha asegurado que, en relación al promedio español, la inversión presupuestaria valenciana por habitante en sanidad es un 12,4% inferior y que, además, la eficiencia económica en la gestión de este presupuesto es "casi" un 19% más baja.
Como consecuencia de ello, ha proseguido, la cantidad de los recursos humanos y materiales de los que dispone la sanidad pública valenciana, así como el nivel de calidad de las prestaciones que proporciona a la ciudadanía, es un 31,5% inferior. "Todo este escenario hace que la eficacia sanitaria -capacidad de curar y salvar vidas- del sistema público de salud valenciano sea hasta un 14,61% inferior a la de España en su conjunto".
Por otra parte, el informe ha reflejado también que la comunidad es una de las regiones que tiene unas mayores tasas de mortalidad en hemodiálisis. "Son los líderes en el porcentaje de privatización en hemodiálisis en España", pero la tasa de fallecimientos está por encima de la media, ha explicado Lozano, quien ha alertado de que este modelo de gestión también ha hecho que aumente el gasto de las pruebas de diagnóstico por imagen y resonancia magnética.
Tras valorar estos datos, los responsables de UGT han asegurado que es "escandaloso" el análisis comparativo entre el sistema sanitario valenciano y el del resto de España y han pedido a la Comunidad de Madrid que antes de iniciar el "proceso de privatización" tenga en cuenta los datos obtenidos en la Comunidad Valenciana. "Hemos querido que se conozca este sistema para que no lo copien el resto de regiones", ha zanjado.

06 marzo 2013

Los valencianos pagan cinco veces más al presidente del Valencia que al de la Generalitat


Pese a que el equipo de fútbol ha pasado a estar controlado por el Govern, los sueldos de la sociedad anónima deportiva mantenida ahora con el sostén público permanecen intactos



Llorente, en una imagen de archivo. EFE
Llorente en una imagen de archivo
"¿Debería afrontar tranquilo Ernesto Valverde (entrenador del Valencia CF) la oferta de renovación que le ha lanzado el club dada su situación?". Esta pregunta la lanzaba un periodista en rueda de prensa hace un par de semanas, pero su destinatario no era el presidente del equipo che, ni el marco del encuentro con los periodistas, la sala de prensa del club de Mestalla. El destinatario era José Ciscar, vicepresidente del gobierno autonómico valenciano, y el espacio, la rueda de prensa posterior al pleno del Consell que preside el líder del PP valenciano, Alberto Fabra.
El motivo de que el fútbol tomara protagonismo en la misma se debía al pago por parte de la Generalitat de casi 5 millones de euros de la deuda de la sociedad anónima deportiva, cuyo principal accionista de facto es el propio gobierno autonómico. Como ya en su día explicó Público, en 2009 la Generalitat avaló a través del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) un crédito de Bankia a la Fundación ValenciaClub de Fútbol para que esta entidad se hiciera con el control accionarial del equipo. Ahora, tres años después, la fundación -que nunca tuvo mecanismos para generar los ingresos suficientes para devolver el préstamo- ha renunciado al pago, traspasando la deuda a las arcas públicas.
Así, la Generalitat ya ha empezado a cargar la deuda de la sociedad anónima deportiva sobre los valencianos, aunque sin asumir la titularidad de las acciones, que aún permanecen de modo simbólico en manos de la fundación. Sólo así se puede explicar que, tres semanas después, el presidente del Valencia CF y otros altos cargos del club continúen cobrando más que el presidente de la Generalitat (66.297 euros brutos al año), incumpliendo la legislación valenciana sobre salarios de directivos de empresas públicas.
En concreto, el presidente del Valencia, Manuel Llorente cobra anualmente 343.000 euros de la entidad mantenida con dinero público, cuando la ley establece que el sueldo máximo que puede alcanzar un directivo de una empresa pública valenciana es de 55.391 euros anuales. Y Llorente no sería el único que debería bajarse el sueldo. Fuentes del Valencia CF informaron a Público de que al menos dos de sus empleados, el responsable de marketing Damià Vidagany (que cobra alrededor de 150.000 euros al año) y el director de comunicación Jordi Bruixola (con 90.000 euros al año), también deberían rebajarse sustancialmente su sueldo actual.

Precedentes 

No obstante, esto por ahora no ha sucedido, dándose la extraña circunstancia de que, mientras los altos cargos de la Generalitat valenciana se han rebajado este año su sueldo un 1,95% (una proporción equivalente al incumplimiento del déficit previsto para la autonomía en 2012), los de la sociedad anónima deportiva mantenida ahora con el sostén público, permanecen intactos. Del mismo modo, tampoco se han modificado en ningún modo los salarios de los jugadores, aunque en su caso los dos reales decretos de la Generalitat que regulan el sueldo de los directivos, promulgados en 2011 y 2012, no les afectarían.
En la última rueda de prensa posterior al pleno del Consell, el vicepresidente Ciscar aseguró que la Generalitat tratará de presentar "bastante antes de Fallas" (sin precisar si se refería a la plantà del 15 de marzo, la cremà del 19 o la crida, que se produjo antes de su declaración) su plan para recuperar los 4,8 millones de euros de dinero público entregados a Bankia en lugar de la fundación así como los otros 81 prestados a la misma; una posibilidad para la que el ex presidente de la fundación VCF, Társilo Piles, dijo el pasado mes de enero no encontrar ninguna vía ni posible ni viable. Inmediatamente después, Piles anunció su dimisión.
En varias situaciones precedentes de pagos y adelantos de dinero público para competiciones deportivas realizados por la Generalitat, como la construcción del circuito urbano de Fórmula 1 o el canon anual para la celebración de la misma competición, los valencianos no recuperaron el dinero invertido pese a las promesas de "coste cero".
Desde luego esta noticias es ya la gota que colma el vaso de la desvergüenza a que puede llegar el gobierno de la Generalitat Valenciana con el señor Fabra a la cabeza, un gobierno que a despilfarrado y saqueado las arcas públicas de nuestra Comunidad, nos han recortado a los ciudadanos en Educación, Sanidad, Dependencia y derechos sociales hasta la estenuación y todavía tienen la cara dura de malgastar nuestro dinero en pagar las deudas adquiridas por el Valencia C:F. además de seguir manteniendo los astronómicos sueldos que venian percibiendo  directivos, cuatro técnico y jugadores, esto es para siguiendo el simil futbolistico, tirarles a patadas de la potrona por engañar y ofender de esta forma tan descarada la inteligencia de todos nosotros.

04 marzo 2013

El Consell suministrará los productos farmacéuticos a los enfermos crónicos


Sanidad aprueba un decreto para ahorrar 300 millones de euros en gasto farmacéutico


Pleno de Consell

Con el suministro directo de los fármacos a los pacientes crónicos, un mayor control de las recetas médicas y la revisión de los historiales de los que toman varios medicamentos cada día, el Consell pretende ahorrar unos 300 millones de euros en gasto farmacéutico. El Gobierno valenciano aprobó este viernes un decreto ley que contempla incentivos a los profesionales sanitarios que contribuyan a reducir la factura farmacéutica.
El decreto contempla la dispensación y administración “directa y eficiente” de fármacos a los enfermos crónicos, así como a las personas mayores ingresadas en las 22.000 plazas de las residencias de tercera edad. El nuevo sistema de control, que comenzará a aplicarse el 1 de abril, afectará a los pacientes con enfermedades de alta prevalencia como la diabetes, la dislipemia o hipercolesterolemia, asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, osteoporosis y antiácidos, según detalló el consejero de Sanidad, Manuel Llombart, quien aseguró que “no se mermará la calidad asistencial de paciente”.
Un grupo de expertos establecerá unas recomendaciones de determinados medicamentos para cada patología. El decreto también incluye iniciativas en el ámbito ambulatorio para impulsar los programas ya existentes de revisión de historiales farmacológicos y el seguimiento de las personas polimedicadas y crónicas. Otra medida es la potenciación de la compra centralizada de medicamentos en el ámbito hospitalario.
Al margen de este tema, el vicepresidente del Consell, José Ciscar, se empleó a fondo, tras la reunión del Consell, que se celebró en Mutxamel, en atribuir el incumplimiento del déficit por parte de la Comunidad Valenciana a “una financiación injusta que se debe de cambiar”. Según Ciscar la Generalitat está cumpliendo con los ajustes “sin recortar en gasto social”. Y citó el despido de 3.000 empleados públicos, la supresión de fundaciones y un conjunto de medidas que permitieron ahorrar más de 1.000 millones de euros.

Rebaja de sueldo

Pese a todo, el incumplimiento del déficit fijado por el Gobierno en el 1,5% y que en la Comunidad Valenciana alcanzó el 3,45% ha pulverizado las previsiones del Consell. La realidad obligará a nuevos recortes y sacrificios, que Ciscar no quiso por el momento desvelar, aunque admitió que en la próxima nómina los consejeros y los altos cargos, como los directores generales o secretarios autonómicos, se bajarán el sueldo un 1,9%. Es decir, lo equivalente al incumplimiento del déficit, tal y como habían anunciado. Según Ciscar todavía hay “margen” para aplicar nuevas medidas “eficientes y eficaces” para adelgazar la administración pública valenciana, y citó una inminente redistribución de los puestos de trabajo dentro de la Generalitat o el plan contra el absentismo laboral.
Como todos sabemos desde hace tiempo, las arcas públicas de la Generalitat Valenciana se encuentran en quiebra total, mostrándose incapaz el Gobierno del señor Fabra de hacer frente a la descomunal deuda que han acumulado durante más de 18 años los sucesivos gobiernos de PP  que han  despilfarrando y saqueando las arcas públicas con ruinosos proyectos faraónicos, corruptelas y quebrando a cajas y Bancos de nuestra comunidad hasta hacerlos desaparecer. Todo ello da como resulta  que el actual Gobierno de la Generalitat ha sido incapaz de cumplir con el déficit fijado  para las comunidades autónomas en el 1,5%  rebasando ampliamente dicha cifra   quedando el déficit de nuestra Comunidad en el 3,45%, superando por lo tanto el fijado por el Gobierno de España y como consecuencia de este mal dato de las cuentas públicas estos “señores”  lo quieren ahora corregir con más recortes, dando de nuevo una nueva vuelta de tuerca más a las vidas de la ya maltrecha ciudadanía valenciana incluso criminalizando ahora a los enfermos crónicos pretendiendo recortar 300 millones de euros con el suministro directo de los fármacos a los pacientes crónicos, un mayor control de las recetas médicas y la revisión de los historiales de los que toman varios medicamentos cada día, además de estas medidas también  van a incentivar económicamente a aquellos médicos que menos fármacos receten a los pacientes.

Estas medidas tan perjudiciales para sectores tan sensibles como los enfermos crónicos que además suelen ser nuestros mayores y por lo tanto uno de los colectivos más indefensos de nuestra sociedad, están pasando las líneas rojas de lo que los ciudadanos debemos de permitir, debiendo dar cumplida respuesta a un Gobierno que  junto con el de España está arruinando la vida de cientos de miles de ciudadanos valencianos, por eso y para mostrar nuestra oposición e indignación a todas estas injusticias es muy importante que acudamos a todas las protestas y manifestaciones que se convocan en contra de los recortes para decirles claro y alto ¡BASTA YA!

02 marzo 2013

Susan George: “Ya no se puede llamar crisis, es un capítulo más de la lucha de clases”


El día frío y lluvioso contrasta con la energía que desprende Susan George (Ohio, 1934). Sentada en una sala forrada de madera, en el quinto piso de un edificio del Paseo de Recoletos de Madrid, la consagrada politóloga y analista recibe a La Marea para compartir 20 intensos minutos de su visita a Madrid y hacer un conciso diagnóstico de la coyuntura económica y social mundial.

La presidenta de honor de Attac Francia, vinculada durante años a Greenpeace, llega a España para presentar su libro El Informe Lugano II. Esta vez vamos a liquidar la democracia, una combinación de ficción y realidad. En su relato, la autora junta en los alrededores del lago suizo Lugano a un grupo de diez expertos para elaborar un segundo texto -George escribió en 1999 la primera entrega de la saga, El Informe Lugano- sobre el funcionamiento del sistema capitalista a petición de los “solicitantes”. Y hasta ahí la ficción. Al margen de este escenario metafórico, la autora defiende que todo lo recogido en el libro es real. Los interesados en que se realice este estudio son una minoría político-económica mundial y la conclusión del informe es que se debe acabar con la democracia, pues es un “fastidioso sistema político, especialmente desagradable para unos pocos, porque se opone a la minoría cuyo único objetivo es aumentar sus beneficios y cuotas de poder”.
¿Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades?
No. La sociedad, no. Estamos sufriendo una estrategia ideológica que busca acumular el poder y el dinero en unas pocas manos. Es la puesta en práctica del puro neoliberalismo.
¿Qué ha pasado en los más de diez años que han separado el primer del segundo informe Lugano?
La respuesta corta es que todo ha empeorado. La larga es que el sector financiero está dirigiendo y controlando la economía real. La verdad es que la crisis estalló a causa de la derogación de diversas leyes en EE.UU. y Gran Bretaña, las cuales mantenían a las finanzas bajo control. Tardaron sólo tres años en crear una explosión enorme, pues se quedaron sin reglas que cumplir.
Y la consecuencia directa es…
Su riqueza y una sociedad global cada día más desigual, con serios efectos perjudiciales en nuestro medio ambiente, que me tienen espantada.
En su libro llama “solicitantes” a ese un grupo de elegidos que gobierna ahora mismo. Detrás de sus intereses, ¿qué se esconde? ¿ignorancia o maldad?
Hay dos formas de responder a esa cuestión y de entender cómo hemos llegado hasta aquí. Por un lado está el punto de vista de los economistas norteamericanos Paul Krugman y Joseph Stiglitz, que ven las políticas europeas como una locura. Stiglitz cree que es una medida suicida que los europeos no puedan trabajar y ambos consideran que estas políticas se enmarcan entre la estupidez y la ignorancia. Pero yo creo que los que nos gobiernan no son nada tontos. Han elegido servir a los intereses de los bancos y la llamada clase elitista de Davos.
Pero se está gobernando de una forma muy dura…
Las políticas que se están llevando a cabo son muy crueles con la sociedad. Me han dicho que los griegos están siendo tratados como ratas de laboratorio para ver cuánto castigo pueden aguantar. Los que gobiernan piensan: “Vamos a hacer un experimento científico y vamos a juntar a un montón de ratas en una determinada situación. Veremos qué pasa si no reciben suficiente comida, si no reciben atención si están enfermos y ven morir a sus ratitas bebé. Experimentemos:  ¿Habrá una revuelta de las ratas? ¿O no?”. Creo que ellos saben lo que están haciendo. Además hay un componente ideológico, por supuesto. Lo que no se puede hacer es seguir reduciendo la economía y luego lamentar que no hay crecimiento.
A los españoles nos dicen que la austeridad es la primera piedra para reactivar la economía…
Es absurdo. Está demostrado, y corroborado por el propio Fondo Monetario Internacional, que la austeridad provoca más desigualdad social, depresión y alarga la crisis.
¿Tenemos que seguir hablando de crisis?
Yo creo que ya no se le puede seguir llamando crisis, porque la propia definición de la palabra establece una época con principio y fin. Es un capítulo más de la lucha de clases que está en marcha,  aunque la gente ahora no utiliza ese vocabulario.
¿Son los movimientos sociales un dolor de cabeza para el poder?
Por supuesto. El gran papel de los movimientos sociales en este momento es luchar, porque nadie lo hará por ellos. El futuro depende de las personas, y esto es difícil de cambiar porque hay mucha gente acostumbrada a la idea de que, puesto que han elegido a los representantes, a ellos les corresponde hacer algo al respecto. El gobierno no va a hacer nada combativo, no va a plantar cara al capital. Solo hay que mirar a Francia, que se supone que tiene un gobierno socialista y no está haciendo nada diferente.
¿Por qué si el problema es global no hay un movimiento global en contra?
Es demasiado pronto todavía. Estamos construyendo una Europa nueva a partir de la “Cumbre Alter”, que creo que ya es un avance notable. Aquí se juntarán sindicatos, organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales ecologistas, feministas… varios grupos de personas que están involucradas en tratar de cambiar las cosas desde un punto de vista u otro. Y estos se unen en una plataforma común. Es un avance muy esperanzador porque hay que acabar con las fronteras entre países, pero un movimiento mundial creo que es prematuro. Me gustaría ver uno.
Los españoles han dejado de preguntar por la fecha en la que se acabará la crisis…
A la clase Davos le encantaría que fuera así siempre. No puedo responder a preguntas sobre el futuro, porque hay muchas variables, así que no sé decir cuándo superará España esta situación. El error ha sido que los españoles estaban esperanzados con que los otros fuesen mejores que los que gobernaban, estaban enfermos del PSOE, como ahora lo están del PP. La gente sigue estando a la espera de que un día u otro los elegidos se hagan cargo de ellos. Nosotros, el pueblo, tenemos un gran trabajo por delante.
¿Es cuestión de educación política?
Creo que vale la pena invertir en la educación política, que es lo que nos quitaron. Nunca va a existir una sociedad 100% interesada en la política, pero se puede voltear la situación y hacer que una minoría significativa cambie las cosas y que arrastre a la masa con ellos. Por eso la no violencia en el movimiento de ‘indignados’ es muy importante, ya que significa que la mayoría de la gente en España lo aprueba, si se pone violento, entonces será una historia diferente.

01 marzo 2013

El gerente de Emarsa revela que dio 100.000 euros al PP de Valencia

Esteban Cuesta sitúa al PP en la lista de beneficiarios del saqueo de la empresa

Un concejal de Rita Barberá destinó el dinero a pagar un homenaje a los afiliados del partido



El exgerente de Emarsa, Esteban Cuesta, tras una comparecencia judicia

El concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Valencia, Silvestre Senent, recibió 100.000 euros de Emarsa, según la confesión voluntaria que Esteban Cuesta, el exgerente de la empresa metropolitana liquidada en 2010 con un agujero de 11 millones de euros, entregó este jueves en el Juzgado de Instrucción número 15. Entre los años 2005 y 2009, Senent recibió este dinero fraccionado en “cinco o seis” pagos de 20.000 euros que le fueron entregados a través de Santos Peral, secretario general del PP en el distrito de Patraix, en Valencia, y también empleado de Emarsa. Este dinero, según Cuesta, se habría destinado al “pago del homenaje a los afiliados al PP en el restaurante Alameda Palace” de Valencia.
"El señor Senent llamaba directamente a Santos Peral para que preparara el dinero, se lo entregaba y luego, asado bastante tiempo desde la realización del evento, me pasaban la factura para su firma. Según todos ellos era práctica habitual de antes de mi llegada", explica Cuesta. Durante ese tiempo, Senent era secretario general del partido en Valencia, cargo que abandonó, tras 20 años, a mediados de enero de 2013.
La autoconfesión de Cuesta, que está imputado por estafa, malversación de caudales, administración desleal, falsedad en documento mercantil, cohecho y delitos societarios en el marco de su actividad en la depuradora de Pinedo, sitúa al PP en la lista de beneficiarios del saqueo de Emarsa. Cuesta explica en su escrito que el concejal de Hacienda del Gobierno de Rita Barberá protegía a uno de los personajes más turbios de la trama, el responsable de informática Sebastián García Martínez, Chanín.
En 2004, el entonces gerente de Emarsa planeó despedirle, según su relato, pero tuvo que desistir por esta razón: “Me dijeron que era intocable, que lo protegía Silvestre Senent”. El actual teniente de alcalde de Valencia presidió Emarsa antes de la llegada al cargo, en 2002, de Enrique Crespo, exalcalde de Manises y exvicepresidente de la Diputación de Valencia, también imputado.
No es la primera vez que las sombras de sospechas se proyectan sobre Senent. El exconcejal del PP y exdirector de calidad de Emarsa, Juan Carlos Gimeno, también imputado en el caso Emarsa, aseguró en su tercera declaración ante el juez instructor, que el concejal de Hacienda obtuvo diversos regalos de Emarsa: relojes, cheques regalos de unos grandes almacenes, ordenadores o teléfonos a cuenta de la extinta entidad metropolitana encargada de la gestión de la depuradora de Pinedo. También la que fuera secretaria del gerente de Emarsa durante siete años, Marisol Gálvez, afirmó en una declaración que, según su información, Emarsa también regaló ordenadores a la asesora de Senent, María Dolores Cubells. Gálvez declaró aismismo como testigo que en dos ocasiones llevó regalos a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, pagados por la depuradora. Fueron dos bolsos de la marca de lujo Loewe que ella mismo se encargó de comprar los bolsos y llevarlos al Ayuntamiento.
Cuesta, que fue presidente de la agrupación local de Poblats de l’Oest del PP y alcalde pedáneo de Benimàmet por nombramiento de Rita Barberá, refiere en su escrito que cuando se hizo cargo de la gerencia de Emarsa, tras una reunión con el presidente de Emarsa, Enrique Crespo, se le explicó el patrón que debía seguir: “Unas empresas van a realizar las tareas de verdad y otras facturarán por la diferencia”. Un informe elaborado por la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi), que era propietaria de Emarsa, comparó la producción y facturación de residuos de la planta en esa etapa, así como los datos proporcionados por la unión temporal de empresas que gestiona ahora la depuradora, y el resultado es que entonces se producía hasta "dos y tres veces" más lodo que ahora. Lo que, traducido por la acusación popular, significa que las cifras de producción de residuos se hinchaban para poder pagar más por servicios ficticios. Varios testigos han admitido que la sociedad pagaba 42 euros por tonelada de lodo al empresario José Ignacio Roca, sobre el que pesa una orden de busca y captura internacional, quien subcontrataba a otra empresa (Notec) que lo hacía por 18 euros.
El exgerente Cuesta reconoce que la diferencia se la repartían entre Roca, Notec y “por partes iguales”, él, Crespo, José Juan Morenilla y Ignacio Bernácer, estos últimos responsables de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), un órgano de la Generalitat encargado del control de las depuradoras. Como ya habían declarado dos imputados previamente y ahora ha admitido el exgerente, Cuesta recibía el dinero y se encargaba de darles su parte a los otros tres implicados. Entre los cuatro, llegaron a percibir 180.000 euros al mes. Primero, la entrega se hacía en cajas de zapatos. Posteriormente, Roca depuró la técnica y la distribución de dinero se hacían mediante tarjetas de crédito vinculadas a cuentas del empresario prófugo de la justicia, desde las que Cuesta, Crespo, Bernácer y Morenilla iban haciendo retiradas de efectivo, según ha ratificado ahora el exgerente.

RITA BARBERA UN MITO QUE SE DERRUMBA